Un nuevo sistema basado en un robot y en el uso de videojuegos puede convertirse en una herramienta útil para la rehabilitación de los pacientes que han sufrido un ictus. De momento, el sistema, que se denomina ArmAssist, está siendo analizado en el hospital La Fe de Valencia. «Es el primer hospital en el que lo instalamos y los informes de satisfacción con los pacientes han comenzado en el mes de julio y durarán varios meses, por lo que aún es pronto para realizar valoraciones», explican los creadores de este sistema. El dispositivo podrá ser usado tanto por pacientes agudos, tras haber padecido un ictus, como en crónicos, para el entrenamiento continuo de las extremidades superiores en otro tipo de patologías además del ictus.

Arm Assist es un novedoso dispositivo que ayuda a las personas que hayan sufrido un ictus a mejorar la calidad de la rehabilitación en sus casas. El sistema está formado por una prótesis que se une al brazo y unos videojuegos que ayudan a entrenar la zona afectada, al mismo tiempo que permite un seguimiento online por parte del médico. Según los autores del sistema, el hecho de poder realizar una «rehabilitación más continuada y provechosa en casa» es muy beneficioso para el paciente no sólo a nivel físico, sino también sicológico, que puede entrenarse en su entorno, de una forma más cómoda y amena, gracias a los videojuegos, y menos traumática.
Ensayo clínico
De momento, el sistema está en fase de valoración en el hospital valenciano para evaluar su utilidad y poder así identificar las necesidades de formación que pueden surgir tanto en los pacientes como en los terapeutas. El protocolo clínico diseñado en este caso será un ensayo clínico prospectivo no randomizado. «Se trata de identificar tanto la viabilidad de la tecnología como los posibles obstáculos a la hora de trasladar la rehabilitación al hogar. Durante los ensayos clínicos, los pacientes comenzarán a utilizar ArmAssist tan pronto como sea posible, y serán enviados a casa con él para continuar su rehabilitación en el hogar bajo la supervisión remota por parte del terapeuta», señalan.
Detrás de este proyecto se encuentra FIK, una iniciativa empresarial centrada en la investigación en el ámbito del envejecimiento y la discapacidad.
ArmAssist está compuesto por un dispositivo de base móvil que se conecta al usuario mediante una prótesis que capta y mide los movimientos del hombro y el codo. Esta base móvil va conectada a un ordenador estándar que relaciona los movimientos realizados por el brazo con las peticiones y exigencias de los videojuegos desarrollados ad hoc para la rehabilitación de las extremidades superiores.
Rehabilitación
Los ejercicios propuestos para favorecer la rehabilitación del paciente son de dos tipos: de evaluación y de entrenamiento. Los de evaluación son videojuegos de escasa duración que se deben realizar todos los días al comenzar y finalizar la sesión de entrenamiento. Estos videojuegos trabajan independientemente el rango de movimiento, la fuerza, la trayectoria y la precisión, y sirven al terapeuta para valorar la evolución del paciente.
Los juegos de entrenamiento tienen una duración más extensa y resultan más amenos para el paciente. Su objetivo es precisamente motivar al enfermo a entrenar la extensión del brazo durante más tiempo. Estos integran también un componente cognitivo para poder agilizar también esta faceta. Entre estos videojuegos, hay puzzles, juegos de memoria y solitarios de cartas.
Telerehabilitación
Los programas de rehabilitación implican una combinación de ejercicios que se realizan en la clínica bajo supervisión médica y un conjunto de ejercicios recomendados para realizar en casa. En la actualidad, estos ejercicios no pueden realizarse en la mayoría de los casos fuera de la clínica debido al excesivo tamaño de los sistemas actuales lo que impide su portabilidad, lo cual hace que se encuentren únicamente en el hospital. Además, los terapeutas no tienen ningún tipo de control sobre la terapia y por tanto, no pueden proporcionar un adecuado programa de seguimiento y mejora.
Brazo asistido
A través del software de telerehabilitación que incluye el brazo asistido se crea un vínculo entre el paciente y su terapeuta que permite el entrenamiento de la persona enferma desde su hogar y de una forma más autónoma, ya que a través del programa informático con conexión a Internet, el médico puede asegurarse de que el paciente realiza correctamente los ejercicios.
El terapeuta podrá a su vez realizar una evaluación cuantitativa de la evolución del paciente, un aspecto que no se había cubierto por los sistemas de rehabilitación hasta ahora y supone un valor diferencial para paciente y médico. Este software para la telerehabilitación es una completa herramienta ya que abarca todas las fases de la terapia, desde la planificación, la ejecución y el seguimiento de la misma.
Fuente: www.Abc.es